Imagina que tienes un local donde vendes tus productos. Pues bien, cada mañana abres el establecimiento y depositas con cuidado bastantes obstáculos delante de tu puerta y a lo largo de los pasillos. Eso es, que los clientes no puedan acceder, muy bien.


Seguidamente colocas tus mejores productos en la estantería más alta, así, bien lejos, y algo ocultos claro. ¿Demasiada luz quiza? Procura una iluminación mortecina, que impida la visibilidad.

Así, perfecto. ¡Es hora de triunfar!

Esto, que dicho así es una soberana tontería, es lo que hacemos al no tener en cuenta una web móvil para nuestra empresa o incluso una App, porque los datos indican que móviles y tablets son los dispositivos que año tras año experimentan un mayor crecimiento de usuarios y de los usuarios españoles en particular. Mucho más si atendemos a lo que se nos viene encima con el llamado “Internet de las cosas”, la nueva ola de wearables y lo que significa estar conectados hasta los empastes. Mil y una delicias que nos están esperando para servirnos con afán en nuestra intensa vida de consumidores disfrutones.

Los usuarios ya no estamos sentados delante de un pc, estamos tomando el metro, en el gimnasio, cocinando, buscando un buen bar…y claro, todo esto a la vez.

No desvelamos ningún secreto cuando decimos que:  
El futuro es móvil, muy móvil y mucho móvil

Web móvil y Apps, ¿qué parte del pastel se llevan?

Mucha, según el último informe de 2016 de The APP Date (relativo a 2015):

• España está en el 5º lugar del mundo (se dice pronto) en mcommerce. Parte del e-commerce realizado con dispositivos móviles.
• Las compras por movil y tablet ya suponen más del 30% de las ventas online.
• 6 de cada 10 usuarios de Internet usan estos dispositivos para comprar.

Queremos compartir alguna información general sobre web móviles y apps por si os ayuda a considerar vuestra mejor opción a la hora estar en los bolsillos de vuestros clientes.

Web movil y APP. Pero… ¿de verdad las necesito?

Web movil:

Un página web estándar, no móvil no es capaz de adaptarse dignamente al formato móvil. Pierde legibilidad, información, dificulta el funcionamiento de formularios, menus, etc y ofrece una imagen anticuada. Responsable: la empresa anunciadora.

Una web móvil es una página web diseñada y programada de forma que se adapta a diferentes dispositivos móviles sin perder nada de información relevante ni legibilidad. Digamos que se reestructura en bloques dependiendo del espacio de pantalla disponible y el usuario podrá acceder encantado a toda la info. Gracias a una programación adecuada podrá variar algunas características para adaptar su visualización a las diferentes pantallas.

APP:

Herramienta programada y diseñada específicamente para una función. No vive en Internet sino que se descarga por el usuario, aunque puede requerir de acceso a Internet para cumplir el total de sus funciones. Es como un acceso directo a determinadas acciones favoritas y su uso es eminentemente móvil.

Para empezar he aquí algunas características básicas de web movil/app

Web móvil, cuatro cositas sin importancia

No queremos ser pesados, pero una web necesita ser responsive y si es desde el inicio mucho mejor.
Si aún no lo es, debe ser actualizada lo antes posible. Los usuarios llevan fatal lo de navegar por móvil en una web rígida, con elementos diminutos, medio ocultos y un zoom limitado.

Contenidos

Deben estar muy bien estructurados. Hay que plantearse si algunos contenidos de nuestra vista de escritorio son prescindibles en la vista móvil para ayudar al usuario a centrarse. Un usuario de móvil tiene múltiples estímulos a la vez mientras visita una web, por lo que centrar su atención es esencial, e ir al grano.

Experiencia de usuario

Esto es válido para web y app. Pensar siempre en la experiencia del usuario en una web/app. La misión es cubrir sus necesidades, y no solo en lo que respecta a la actividad comercial en sí, sino que te valorarán instintivamente mediante la experiencia que han tenido a través de la web/app.
La imagen de empresa también se ve afectada por la usabilidad de su web o App.

Optimización y más optimización:

Optimizar para indexarnos bien. Una web tiene su gran baza en una buena indexación, SEO o SEM debemos cumplir con los estándares.

Optimizar el peso y tiempo de descarga para evitar el abandono del usuario. 4-5sgs de espera y la paciencia del usuario se convierte en un “ahí-te-quedas”.

Optimizar para detectar errores en su funcionamiento, ambigüedades en la información o puntos fallidos en la navegación.

Podemos optimizar a muchos niveles, con herramientas online como estas:

• https://developers.google.com/speed/pagespeed/insights/ . Herramienta de Google, en español y ayuda a solucionar los fallos encontrados
• https://gtmetrix.com. En inglés, da info detallada de todas las partes de tu web, valorando de A a F el nivel de “fatalidad” de tus fallos en la velocidad.

Usabilidad

Atender a un sentido intuitivo de la navegación según el tipo de dispositivo y los hábitos del usuario, ayudándole con scrolls horizontales o verticales, incluir gestos táctiles, zooms y elementos desplegables, de un modo evidente.

Mantener el entorno de uso que el visitante espera encontrar, ubicación de los elementos de navegación, buena señalización de las acciones (enlaces, botones, scrolls y zooms). Ya existe un código tácito que facilita la orientación del usuario en una web, aprovechémoslo.

Cuidar el tamaño adecuado para textos, botones y llamadas a la acción (CTA). Comprobar que menús y formularios siguen siendo accesibles y cómodos aún usando los dedos y no el ratón.

Diseño

Como siempre recomendamos, un diseño amigable y atractivo capta la atención al usuario, genera confianza y potencia nuestra imagen de marca.

El aspecto cambia según el dispositivo, pero tanto en horizontal como vertical debe seguir manteniendo coherencia y atractivo.

Siempre deben controlarse los elementos centrales de sliders y cabeceras para que la vista siempre sea representativa y no se pierda información relevante.

Imágenes de calidad: importante, más si las imágenes son de relevancia, como productos a la venta o imágenes explicativas. Las pantallas de retina son estupendísimas, pero requieren mayor calidad de imagen fotográfica, que no falte calidad os lo pedimos por lo que más queráis. Es interesante en este punto recordar el punto anterior de optimización de peso y errores visuales.

Tipografía: Esta juega a dos bandas, estética y funcionalidad. Y no se le da la importancia que merece. Una buena elección de tamaños forma parte de la usabilidad. Esencial para el usuario. Pero además encontrar la fuente adecuada puede beneficiar mucho la imagen y el estilo de nuestra web móvil.

Y qué hay de las APPs?

Volvemos al estudio de The App Date para dar algunos datos interesantes sobre nuestros usos en APPs

• 3 veces más: se compra más cómodamente a través de APPs, que desde navegadores móviles lo que hace que compremos 3 veces más.
• 58%: En ventas de productos, las APPS generan el 58% de ingresos móviles.
• 28 millones es el número aproximado de usuarios de apps en España.
• 30 es la media de aplicaciones descargadas en nuestros móviles, de las que usaremos la mitad.

Quizá necesites una App si tienes una función concreta que ofrecer a tus usuarios y quieres facilitar un uso más eficiente ayudando al usuario a conseguir determinado objetivo a través de tu aplicación.

Son muchos los puntos en común que puedan encontrarse en lo que acabamos de comentar sobre las web móviles, pero hay que entender que cuando una aplicación se descarga por el usuario ya se ha conseguido mucho (pero mucho) como para estropearlo con una APP que no ofrezca lo que se espera de ella, así que merece la pena pensársela un poco.

Cuestiones como estas:

Interfaz:

Puedes tener un logotipo, pero tienes un buen icono para tu App? Uno que la represente, que destaque sobre los múltiples fondos de móvil y que sea identificable rápidamente entre los otros veinte iconos de Apps que haya instaladas. Como sugerencia, elementos sencillos, textos cortos (o ninguno) y colores vivos pueden ayudarte. Impacta con un buen símbolo;-)

Dependiendo de si es una prolongación de tu marca o es un servicio independiente deberás buscar los colores y formas. De cualquier modo estaría bien incidir en ese icono en toda tu imagen de marca.

El diseño de botones, slider para las pantallas y elementos, y cómo se muestran es una labor a llevar conjuntamente con diseñadores web y programadores para conseguir una interfaz atractiva, limpia y apeptecible de manipular.

Más ligera y sencilla si es un App funcional, y con gráficos más complejos si se acerca más al ocio o la gamificación de una actividad.

Pantallas informativas: elige varias vistas representativas de tu aplicación para mostrar en el distribuidor de Apps de forma que el usuario se haga una idea muy aproximada de cómo es tu interfaz.

Lo interesante de las Apps es que el lenguaje visual puede redefinirse, podemos innovar más que con una web ya que al ser un paquete independiente el usuario aprende como usarlo.

Efectividad:

El susuario debe aprender a trabajar con ella de forma rápida e intuitiva. De nuevo el tándem diseño-programación colmará de bendiciones tu App.

Y sea cual sea la función que cumpla tu App, debe ser efectiva y hacer llegar al usuario a su objetivo.

Somos caprichosos, pero no lelos, así que tu App debe tener una utilidad

Entiéndase por utilidad comprar/vender a la velocidad del rayo, que te localicen en plena ventisca montaraz o cargarse un zombi para descargar tensiones, que todo tiene su puntito.

Para descargar y mantener una App debe encontrarse una ventaja diferenciadora en ella. ¿Cual será la tuya?

Experiencia de usuario:

La facilidad de uso está en el ADN de una buena App. Por tanto las necesidades y hábitos del usuario serán lo primero.

• Ojo con la publicidad y las ventanas emergentes que salgan en tu App. Pueden resultar tan molestas que el usuario se deshaga de tí antes de empezar, por pesado.
• No hay que asaltar con ventanas de registro, formas de pago y solicitud de información personal a las primeras de cambio. Sobre todo antes de haber facilitado verdadera información sobre la App.
• Permitir una experiencia relajada de acercamiento al usuario y que finalmente decida si es lo que está buscando evitará frustraciones y genera descargas realistas.
• En este sentido permitir el registro a través de otras redes en las que el usuario ya está registrado facilita la tarea y evita la “pereza” de tener que darse de alta una vez más.
• Mantener un lenguaje claro y preciso para que todo se entienda a la primera.
• El espacio es reducido y la información no debe faltar, ni sobrar. Alejarnos de jergas o códigos que desinformen al usuario.
• Podemos apoyarnos en elementos visuales, y estudiar la jerarquía de textos e imágenes para conducir al usuario por una navegación fácil y completa hasta el objetivo.
• Permitir comentarios de usuarios actuales, las experiencias personales de los ya usuarios pueden complementar muy bien la info oficial y resultar interesantes para quien esté interesado.
• Hay que filtrar pero no censurar, para que la experiencia sea honesta y real.
  
  
  Si es una App de compra/venta, podemos tener en cuenta:
• Mostrar los artículos relacionados. Antes de cerrar la compra es un buen momento ya que el usuario puede comparar o complementar su pedido.
• Permitir al usuario modificar el pedido en cualquier punto de la compra.
• Si existen bonos, descuento o cualquier ventaja, permitir que se aplique sobre la marcha.
• Dejar claro que la compra es segura. Facilitar diversas formas de pago y dar un informe de la compra recién hecha al usuario

Promoción:

Si tu App es buena y lo sabes, procura que se conozca  

El boca a boca con estas cosas funciona, pero no se genera espontáneamente. Si no la conocemos no la amaremos.

Nuestro método infalible para Apps: MUST

Nos llena de orgullo decir que hemos desarrollado el método MUST para detectar si una APP vale la pena en cuatro sencillos pasos.

¿Ya sabes lo que te interesa tener?

¿Necesitas una web móvil?
¿Necesitas una app móvil?
¿O necesitas las dos?